Por Alejandro Ruiz Balza
El contexto de la cuarta revolución industrial en curso impacta en todos los ámbitos. Las sociedades contemporánea necesitan de modo cada vez mas perentorio modificar sus modos de relacionarse desde el pensamiento los aprendizajes para no caer en la obsolencia temprana. La educación, en todos sus niveles, no solo no está ajena sino que es una protagonista activa de los cambios e innovaciones a los que asistimos cotidianamente.
Además de
la ya conocida necesidad de superar la linealidad de la secuencia pedagógica en una
clase que ya no es la continuidad de una fábrica, y los modelos para
invertir la
jerarquía piramidal en las aulas, la convergencia en la producción de contenidos
y conocimientos de modo colaborativo entre alumnos y docentes
plantea un nuevo desafío: la construcción de una didáctica "en vivo",
tal y como la ha bautizado la docente e investigadora Mariana Maggio (2018).
En este
cambio de escenario es fundamental abandonar las prácticas actuales, reconocer
lo que sucede en términos de tendencia y construir vanguardia pedagógica. La
propuesta de una didáctica en vivo implica una manera de crear,
experimentar e inventar en clase aprovechando nuevas estrategias que pueden
sumar nuevas tecnologías para documentar y reconstruir teóricamente lo que se
hace.
Esto no
se agota en la mera incorporación de aplicaciones, gadgets y artefactos digitales,
antes bien estos últimos son facilitadores de la emergencia de una nueva lógica para
la producción colaborativa para la expansión del conocimiento y su puesta en
común en tiempo real.
Para
ponerla en práctica es necesario que alumnos, docentes e instituciones
educativas vayan más a allá de las prácticas pedagógicas y didácticas tradicionales en
el diseño, dictado y evaluación para comprometerse en conjunto con nuevas
propuestas pedagógicas y didácticas que insertan competencias comunicacionales
clave como las nuevas modalidades de producción y consumo de contenidos
integrados transversalmente y los modelos narrativos complejos y transmedia,
la necesidad de concitar la atención en todos los ámbitos y para todos los
públicos, y las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TICs) en
un proceso
creativo iterativo que involucre a todos los actores mencionados en
la construcción
en común de la clase y en una reconstrucción teórica abierta.
En mis
clases presenciales, on-line y blended dictadas en distintos países de
latinoamérica las he aplicado con muy buenos resultados y las recomiendo
ampliamente!
Referencias Bibliográficas:
Aphal,
K. (2018): Contextos de Reinvención de Prácticas. ¿Cómo resemantizar rituales
en el sistema educativo?. Publicado en Perspectivas: Revista Científica de la
Universidad de Belgrano, Año 1, Vol 2. Buenos Aires.
Maggio,
M. (2018): Reinventar la clase en la universidad. Paidós. Buenos Aires.
Morín,
E. ( 1999) 7 saberes necesarios para la educación del futuro. UNESCO. París.
Morin,
E. (1999): La Cabeza Bien Puesta, Repensar la Reforma - Reformar el Pensamiento.
Nueva Visión, Buenos Aires.
Scolari,
C. (2013): Narrativas Transmedia. Deusto. Barcelona.
Serres,
M. (2013): Pulgarcita. Fondo de Cultura Económica. Buenos Aires.